RECOMENDACIONES
Para las rutas de senderismo es aconsejable informarse primero de la ruta y adaptarnos a aquella que mejor se adecúe a nuestra forma física, especialmente si vamos a realizar alguna que implique cierto nivel de dificultad.
Es importante, especialmente en las rutas de cierta complejidad, que tengamos en cuenta el momento de hacerla (primavera, verano, otoño o invierno), ya que debemos de tener en cuenta los factores climatológicos así como las horas de luz solar.
Importante llevar y calzar material de montaña, botas (a ser posible impermeables), chubasquero, mochila, gorra, crema solar y gafas de sol por ejemplo, o en su defecto prendas que no importe ensuciar o estropear con el roce de la vegetación.
Llevar agua y algo de comida (frutos secos o barritas energéticas) especialmente en las rutas más largas y material para la observación del entorno, prismáticos, cámara de fotos etc.
Se aconseja llevar también alguna bolsa de plástico para recoger posibles desechos de la comida que podamos llevar o encontrar.
Para realizar este recorrido hay que tomar la carretera que sale del pueblo y se dirige a la sierra para, una vez pasado el túnel de la vía y, un poco más adelante,
Desde la plaza una empinada calle sube hasta la Iglesia, por la derecha la calle Carmen continúa hasta el Madero, punto desde donde parte el cambio de la Dehesa.
La salida se hace desde la plaza. Por la calle Pozo, y después de dejar a la derecha el antiguo corralón donde se celebraban las capeas durante las fiestas patronales,
Este es sin duda un paseo sorprendente, porque muy cerca de Braojos quedan restos de la Guerra Civil que, gracias a su escasa visibilidad, se han conservado muy bien.
Iniciamos este paseo por una calleja paralela a la carretera de acceso a Braojos, la cual cruzamos para pasar por el campillo y el helipuerto,
Salimos de Braojos rumbo suroeste por una calleja hasta el encuentro con el arroyo de la Dehesa, el cual cruzamos y seguimos hasta su confluencia con el otro arroyo
Con esta ruta urbana, podrás descubrir las fuentes, como la fuente del abrevadero, que data de 1902, cuyas aguas proceden de un manantial.
Setenta y seis rutas publicadas, con distintos niveles de dificultad.